Este enorme desierto de 5240m² se transformó repentinamente, en 1998, en un enorme lago, después de las lluvias torrenciales del fenómeno de El Niño. Hoy en día, esta improbable masa de agua es objeto de una atracción increíble para el turista. Pero, debido al clima, los especialistas creen que este lago no aguantará mucho más. Tenemos que disfrutarlo mientras aún está ahí. ¡Tiempo!